Un Royal Lochnagar especialmente seleccionado, embotellado para conmemorar el día en que la Reina Victoria visitó la destilería en 1848 y emitió la Autorización Real para ella.
Royal Lochnagar está cerca de Balmoral, la finca de la familia real. Al parecer, la historia cuenta que la reina Victoria llegó tarde a su visita guiada, lo que hizo que el director de la destilería se pusiera un poco de mal humor.
Cada año se lanza un lote de 3.000 botellas.
Nariz: Posos de café, azúcar moreno tostado, fruta seca, serrín y especias para hornear.
Paladar: Notas empalagosas de toffee y café, manzanas al horno y jerez seco. Se suma un toque de cedro que aporta un toque cálido de especias.
Finalizar: Sedoso hasta el final, con chocolate, nueces confitadas y pasas.